La semana pasada, me sorprendió una noticia en la que aparecía como titular: INVESTIGAN EL CASO DE UN FETO QUE SOBREVIVIÓ A UN ABORTO.
''Según informó la asociación pro-vida italiana Movimiento per la Vita en su página web, el feto, que tenía 22 semanas, no recibió asistencia sanitaria hasta que el capellán del hospital de Rossano, Antonio Martello, lo encontró todavía con vida horas después del aborto.
Rápidamente, fue trasladado al hospital Annunziata de Cosenza, donde los médicos trataron de estabilizar sus condiciones de vida. Sin embargo, el feto murió horas después, en la madrugada del domingo al lunes.
Tras conocer los hechos, la Fiscalía de Rossano decidió inscribir a algunos miembros del equipo médico en el regristro de los investigados. La hipótesis investigativa es de ''homicidio voluntario'' ya que ''no se puede excluir el eventual dolor o la indiferencia respecto a las posibilidades de supervivencia del feto'' declaró el fiscal Leonardo Leone De Castris.
Aún con todo, el presidente de Movimiento per la Vita, Carlo Casini, denunció que éste ''no es el primer caso de supervivencia a un aborto. Espero que, al menos, el neonato cuente con la dignidad de ser inscrito en el registro civil como niño nacido''.
No sé qué sentimiento les habrá invadido a los lectores, yo personalmente me conmocioné, sentí una especie de impotencia... no solo ya por este niño al que tiraron a la basura como si nada mientras su corazón seguía latiendo, sino por todos los casos que han sido similares. Inclusive, alguien me puede decir, ¿qué diferencia había entre ese niño dentro de la madre y el de fuera? O sea, que si lo pensamos fríamente, realmente esto que es delictivo, e incluso se lleva ante la justicia, es lo que se hace con todos los niños que son abortados, salvo que son asesinados dentro y no fuera.
Es que somos tan inhumanos las personas, que si no vemos, no creemos, si no vemos, no sentimos... ese niño esta dentro del vientre de la madre: ''no es un ser humano, solo un ser vivo'' ese niño muere fuera de la madre... y no creo, que nadie, con cabeza claro, diga: qué más da.
Igual que cuando le enseñas a una persona a favor del aborto un niño abortado y te grita ''aparta esa imagen, eres cruel por enseñármela'' y te dan ganas de decir, ''claro, el cruel soy yo y no el que lo mata porque como total, no se ve...''
Las personas somos tan animales a veces cuando solo funcionamos a base se los sentidos, que muchas veces me pregunto realmente si no serán los animales más humanos, pues al menos no matan a sus crías.
En fin, seamos sinceros con nosotros mismos, y nos daremos cuenta que muchas veces nuestro egoísmo lo encubrimos con un velo de buenas intenciones.
Por cierto, la foto del bebe es de un feto de 22 semanas, bueno, políticamente correcta diré que se trata un ser humano, o de un ser vivo que en unos minutos por arte de magia pasa a ser un ser humano... habrá que preguntarle a la ministra Aído que exactamente, en qué minuto de la semana 22, el ser vivo pasa a ser humano, porque a mí no me queda muy claro.
